Madera + blanco = estilo clásico escandinavo. Eso es Moore: una pantalla blanca en un brazo de fresno natural. Así de sencilla y contemporánea. Y con un toque acogedor, por supuesto. La pantalla aporta una total calidez y un brillo agradable. Es alta y ocupa poco espacio, lo que es ideal para estancias pequeñas.
Está muy bien pero muy lenta la entrega